SlideShow

miércoles, 15 de febrero de 2012

La máquina registradora que cambio la vida de un carnicero, Thomas Watson, fundador de IBM


Ni Harvard, ni Oxford, ni Stanford, una vez más la historia se repite. Un hombre hecho a si mismo que a duras penas aprendió a leer y a escribir en su juventud y que se convirtió en uno de los hombres de negocios más importantes de la historia. Nació en Campbell, Nueva York, en un duro febrero de 1874, lo llamaron Thomas Watson, un niño tímido, asmático y retraído que el destino llevo por derroteros sorprendentes.

Pero nadie lo hubiera dicho, es más, nadie hubiese dado un duro por alguien que se dedicaba a la venta de máquinas de costura e instrumentos musicales Wheeler & Wilcox de forma ambulante y aprendiendo de forma autodidacta técnicas de venta. Aprendió mucho sobre jefes embaucadores y charlatanes, enterandose de que otros vendedores ambulantes cobraban comisión por venta, mientras que él no, siendo despedido por admitir que le robaron una máquina de coser que llevaba a caballo. Después de un tiempo de desesperante pobreza, sin dinero ni trabajo, colaboró con C.B. Barron, un "experto" hombre de negocios, vendiendo acciones en una compañía de préstamos. Barron resultó ser un estafador que un día desapareció con todo el dinero sin dejar rastro, y una vez más Watson perdió su trabajo.

Entonces probó a montar una carnicería en Buffalo, pero no tuvo suerte y se arruinó, viéndose obligado a venderla junto con toda su maquinaria. Entre las máquinas se encontraba una caja registradora de la National Cash Register Company. Cuando Watson fue a la NCR a transferir la propiedad al nuevo propietario de la carnicería, conoció a John Range, quien le ofreció un trabajo en la empresa, le formó como vendedor y Thomas Watson empezó a dar señales de que podía tener un futuro prometedor. Y así fue, no tardó mucho en ascender hasta el puesto de director general de ventas. Más tarde tuvo problemas con la justicia y recibió denuncias por prácticas anticompetitivas, como vender máquinas registradoras defectuosas. Fue condenado a 1 año de cárcel, pero después fue perdonado por haber ayudado a las víctimas de una inundación que hubo en Dayton (Ohio) en 1913, pero fue obligado a abandonar la empresa.

Thomas watson estuvo casi 20 años en NCR y con más de 40 años comenzó otra nueva aventura llamada International Bussines Machines o más conocida como IBM, que a la postre se convertiría en una de las mayores empresas del mundo.