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lunes, 4 de julio de 2011

IBM, principal ganador de la batalla entre HP y Oracle

Los analistas indican que el reciente divorcio de las dos compañías será una oportunidad sin precedentes para que IBM gane clientes.

Además de cumplir 100 años y ser una de las empresas con mayor proyección en los años de convulsiones tecnológicas  que se avecinan, parece que puede ser el gran beneficiario de la polémica protagonizada por los gigantes HP y Oracle, según señalan los expertos. La sensación de inestabilidad que ofrecen ambas empresas provocará que gran cantidad de clientes migren hacia la compañía de mayor solidez del mercado tecnológico como es IBM.

La  batalla dio comienzo con la querella que presentó HP sobre Oracle a raíz de su decisión de terminar con la plataforma de Intel Itanium. HP interpretó este movimiento como una maniobra que buscaba obligar a los clientes a adoptar su hardware basado en SPARC .


Previamente, la relación entre Oracle y HP se había deteriorado debido a la adquisición de Oracle de Sun Microsystems por 7.400 millones de dólares además de la inestabilidad provocada por varios cambios en los equipos directivos de las compañías.

Así pues, varios analistas creen que HP Y Oracle sufrirán las consecuencias de estos enfrentamientos. “Clientes incómodos e inseguros con la situación apostarán por confiar en IBM”, dice Rob Enderle, principal analista del Enderle Group.

Por su parte, Roger Kay, analista en Endpoint Technologies Associates declara que IBM ha institucionalizado este proceso, creando el llamado STG Power Migration Factory para llevar a los clientes de sus competidores hacia los sistemas Power-based. “IBM ha ido extendiendo su liderazgo en los servidores UNIX durante los últimos años, llevándose a cientos de competidores cada año. Por ello,  incluso si Oracle cede y reanuda el apoyo a Itanium, los clientes permanecerán molestos  ante la magnitud del asunto. Si la querella va a juicio, incluso si HP gana, el apoyo vendrá demasiado tarde. Los clientes de las empresas no quieren esa incertidumbre”, sostiene Roger Kay.